La crucifixión de VALE ROTH.

Generalmente este blog se ha caracterizado por efectuar comentarios con algo de roce intelectual. Bueno, al menos, eso intento. H0y sin embargo, quisiera comentar un tema que –en apariencia- es de menos vuelo mental: VALE ROTH.

Para el alienígena que ni siquiera lee la prensa escrita o no pasa por kioskos en la calle, Vale Roth es una chica de la TV, sub 20 (o por ahí), que sale en programas de TV juveniles o en programas de baile. Cede con facilidad ante futbolistas y seudo famosos. Y es de la “U”. Eso es como lo esencial de su biografía.

Según tengo entendido, se filtraron dos vídeos de esta señorita. En uno sale acostada en una cama, dándose un beso con una futura abogada llamada Raquel Calderón (hija de una señora arrugada famosa llamada Raquel Argandoña y de un abogado farandulero llamado Hernán Calderón). No están desnudas, están vestidas, con algo de trago encima y el video es cortísimo. En el segundo video, sale la señorita Roth con su novio (¿?) en actitud claramente erótica, en el lobby de un departamento.

Ahora quizás ustedes se pregunten: Habiendo tantos temas relevantes en el país ¿por qué chucha vas a hablar de una maraca (mujer fácil)?

Aquí va la respuesta: “Por la reacción”.

Porque vivimos en una sociedad brutalmente machista, porque vivimos en una sociedad en que esa mina tiene que pedir disculpas públicas, por un acto en esencia, PRIVADO.  Porque ninguno de los hombres involucrados en los videos ha tenido que dar la cara, ni pedir disculpas. Porque la sociedad condenó a Vale Roth como una mina fácil. Porque quizás su familia le quitó el saludo. Porque quizás “perdió la honra”. Porque cuando hay filtraciones de videos, siempre hay detrás un hombre herido en su orgullo (o que necesita probar su hombría mostrándole a otros hombres el video, dando cuenta de que por sí sólo, no puede valerse como hombre, implicando así,  cierta cualidad homosexual de quienes suben videos sin consentimiento de la contraparte: “quiero que mis congéneres me digan que soy hombre, necesito que otro hombre me diga lo macho que soy”). Porque ¿por qué cresta debería importarme lo que hace una mina con su cuerpo y en su tiempo libre? ¿Desde cuándo, como sociedad, nos entronizamos como líderes morales? ¿Quién nos otorgó dicha calidad? La verdad es que está sociedad que se precia de ser liberal y tolerante, está llena de mierda en su interior. He dicho.