VISTIENDO LAS PALABRAS PT. I

Nuestra crianza está plagada de reglas de urbanidad y respeto que debemos obedecer. Hay ciertas cosas que, simplemente, no se deben hacer. Cuando creces, de manera inconsciente, muchas reglas permanecen en ti. Por ejemplo, nadie dice que un bebé es feo. Todos los bebés son lindos. Cuando todos sabemos que a veces la genética influye.

Ese afán de disfrazar el discurso es lo que me ha impulsado a escribir sobre los más típicos eufemismos. Aquí vamos. Primero el eufemismo, luego la real significancia.

1. - Personas en situación de calle= pobres. Esta frase la he escuchado mucho en los medios y algunas personas que les duele decir: pobres. No se refiere a la pobreza espiritual, sino a la gente que no tiene dónde caerse muerta, a la gente que pide en la calle, que no tiene que comer y que no tiene hogar (pobreza material). Como decir “pobre” suena muy feo y fuerte, es mejor dar a conocer la situación de esa persona. Su situación es de “calle”. Ahora, ¿qué alguien me explique como mierda es esa situación? He visto en mi vida personas en una situación embarazosa, chistosa, triste, pero nunca de calle. Y si ese es el lugar en que generalmente estas personas viven, ¿qué sucede con la gente de los circos? ¿Están en situación de circo o de carpa? Hay que decir las cosas como son, en Chile hay pobres. Y según las últimas estadísticas, son hartos. Y los pobres no van a desparecer, por más que intenten llamarlo “persona en situación de calle”.

2.- Intervención Militar= Guerra. Desde la segunda guerra mundial no escucho la expresión “guerra”. Sin embargo, en el Golfo, Irán, Irak, Balcanes, etc. han existido intervenciones militares. No, ahí nunca hubo guerra. Los soldados iban a jugar a la pelota y a Doom a escala real. Pero ¿guerra? Jamás. Solo intervienen un rato, dejan unos cuantos muertos (civiles en su mayoría o también llamados “daños colaterales”) y se van (obviamente con un país en ruinas y completamente saqueado).

3.- Estoy confundida = me gusta otro. Acá entramos en un ámbito netamente femenino y vinculado a las relaciones humanas. Esta frase generalmente la dicen las mujeres, los hombres somos demasiados francos como para dec ir: me gusta otra. La mujer, en cambio, quizás por ser más perceptiva que el hombre siente que la verdad desnuda puede ser devastadora. Y ciertamente lo es. Y lo confundida puede ser un simple dilema entre: llegó este nuevo chico que creo que me gusta, pero con mi novio (o ex a esa altura) tengo una relación ya y no quiero herir sus sentimientos. Lectora mujer, simplemente dígaselo, aunque le duela.