Just a thought, part. I
Me di cuenta que este blog, mi querido espacio, se estaba llenando de videos, se había desvirtuado de mi idea inicial, de mis viejos comentarios, se me había olvidado lo mucho que me gustaba escribir. Aquí vuelvo con algunas ideas.
- En un par de días más entrará en vigencia en Santiago lo que se conoce como “Transantiago” , en breves cuentas algo tan complicado como rapear en chino mandarín al revés. Un rompecabezas pero sin solución. Como si fuera poco, diariamente nos bombardean con imágenes de señores y señoras que tienen problemas con los recorridos, las formas de pago, etc. Ahora, lo que para mi resulta gracioso, es que la imagen corporativa de este inmenso embrollo sea nada más y nada menos que nuestro queridísimo Iván Zamorano, quien mejor para darle el “vamos” a este proyecto que el usuario más frecuente de las micros chilenas, en fin, el individuo más idóneo para darle seriedad a una confusión que ni el mismo Zamorano entiende.
- Diariamente los medios nos dicen cosas tales como: “La delincuencia aumenta”, “El 60% de los chilenos se siente inseguros”, “mano dura contra la violencia”, etc. ¿Solución de los políticuchos y diversas autoridades? Más cárcel, más años a la condena de los imputados, en el fondo, más “mano dura”. Yeah right. Vaya forma de combatir el problema. Como si castigando al otro se va a modificar su conducta, cuando lo que realmente modifica son las oportunidades. ¿Es una solución la cárcel? Claro metámoslos a todos hacinados en cárceles infestadas de reos en condiciones paupérrimas, que buen remedio, así no cometerán más delitos y cuando busquen trabajo todo el mundo les dará pega. Imbéciles. ¿Por qué mejor no te preocupas de darle oportunidades? ¿Por qué no con esa plata con la que construyes cárceles la inviertes en oportunidades para aquellos jóvenes que no aún no van presos? ¿Por qué mejor no te encargas de disminuir las diferencias sociales en un país en que el “pobre” es generalmente considerado “flaite”? ¿Por qué no mejor destruyes o incineras esos enormes avisos publicitarios... ...con modelos que en nada representan al chileno medio, que lo único que hacen es agobiarnos con un incesante consumismo y que te invitan a comprar un determinado estilo de vida (compra esto, compra lo otro, facilidades de pago, en otras palabras, endéudate comprando nuestros bienes para que los altos ejecutivos sigan vacacionando en el extranjero y comprando más propiedades, mientras los demás vivimos un infierno de deudas mensuales)? En una sociedad totalmente materialista, donde se expresa más con bienes materiales que con contacto afectivo directo como una sonrisa, un beso o un abrazo, donde tener “tales bienes” o tener “tal estilo de vida” constituye la fuente de la felicidad, no me extraña que aquellos que no tienen la suerte de contar con bienes, terminen seducidos por lo material.
- Hace como unas semanas, mientras me dirigía a Viña del Mar, en el desayuno leía el cuerpo B del Mercurio (“Economía y Negocios”), en él hay una sección sobre alguna noticia publicada en el The Economist (prestigioso periódico londinense de clara tendencia neo-liberal, fieles estandartes del capitalismo desde el siglo XIX). No dejó de llamarme la atención una noticia que decía más o menos así: “En efecto, la globalización sí produce desigualdad”. Es decir, The Economist (prestigioso periódico londinense de clara tendencia neo-liberal, fieles estandartes del capitalismo desde el siglo XIX) admitía que- redoble de tambores- la globalización causa desigualdad. Decía eso, en enero del 2007. Mmmm… ¿eureka? ¿Genios?
- Todos sabemos lo imbécil y desafortunadamente poderoso que es George W. Bush, así también casi todos sabemos que es un presidente católico, pero resulta novedosa la forma en que profesa su fe. A mí como católico me sorprende. Es sin duda único en su especie. Les procedo a explicar. Antes de ser presidente de los EE.UU., fue gobernador del estado de Texas, uno de los únicos estados en que aún existe la pena de muerte como castigo para los delincuentes altamente peligrosos. George W. Bush, como buen gobernante católico, puso su firma como gobernador y mató a 152 personas. ¿Será como el cura Gatica, que predica pero no practica, pero en este caso, que predica, practica poco y asesina? Alabado seas.
Me di cuenta que este blog, mi querido espacio, se estaba llenando de videos, se había desvirtuado de mi idea inicial, de mis viejos comentarios, se me había olvidado lo mucho que me gustaba escribir. Aquí vuelvo con algunas ideas.
- En un par de días más entrará en vigencia en Santiago lo que se conoce como “Transantiago” , en breves cuentas algo tan complicado como rapear en chino mandarín al revés. Un rompecabezas pero sin solución. Como si fuera poco, diariamente nos bombardean con imágenes de señores y señoras que tienen problemas con los recorridos, las formas de pago, etc. Ahora, lo que para mi resulta gracioso, es que la imagen corporativa de este inmenso embrollo sea nada más y nada menos que nuestro queridísimo Iván Zamorano, quien mejor para darle el “vamos” a este proyecto que el usuario más frecuente de las micros chilenas, en fin, el individuo más idóneo para darle seriedad a una confusión que ni el mismo Zamorano entiende.
- Diariamente los medios nos dicen cosas tales como: “La delincuencia aumenta”, “El 60% de los chilenos se siente inseguros”, “mano dura contra la violencia”, etc. ¿Solución de los políticuchos y diversas autoridades? Más cárcel, más años a la condena de los imputados, en el fondo, más “mano dura”. Yeah right. Vaya forma de combatir el problema. Como si castigando al otro se va a modificar su conducta, cuando lo que realmente modifica son las oportunidades. ¿Es una solución la cárcel? Claro metámoslos a todos hacinados en cárceles infestadas de reos en condiciones paupérrimas, que buen remedio, así no cometerán más delitos y cuando busquen trabajo todo el mundo les dará pega. Imbéciles. ¿Por qué mejor no te preocupas de darle oportunidades? ¿Por qué no con esa plata con la que construyes cárceles la inviertes en oportunidades para aquellos jóvenes que no aún no van presos? ¿Por qué mejor no te encargas de disminuir las diferencias sociales en un país en que el “pobre” es generalmente considerado “flaite”? ¿Por qué no mejor destruyes o incineras esos enormes avisos publicitarios... ...con modelos que en nada representan al chileno medio, que lo único que hacen es agobiarnos con un incesante consumismo y que te invitan a comprar un determinado estilo de vida (compra esto, compra lo otro, facilidades de pago, en otras palabras, endéudate comprando nuestros bienes para que los altos ejecutivos sigan vacacionando en el extranjero y comprando más propiedades, mientras los demás vivimos un infierno de deudas mensuales)? En una sociedad totalmente materialista, donde se expresa más con bienes materiales que con contacto afectivo directo como una sonrisa, un beso o un abrazo, donde tener “tales bienes” o tener “tal estilo de vida” constituye la fuente de la felicidad, no me extraña que aquellos que no tienen la suerte de contar con bienes, terminen seducidos por lo material.
- Hace como unas semanas, mientras me dirigía a Viña del Mar, en el desayuno leía el cuerpo B del Mercurio (“Economía y Negocios”), en él hay una sección sobre alguna noticia publicada en el The Economist (prestigioso periódico londinense de clara tendencia neo-liberal, fieles estandartes del capitalismo desde el siglo XIX). No dejó de llamarme la atención una noticia que decía más o menos así: “En efecto, la globalización sí produce desigualdad”. Es decir, The Economist (prestigioso periódico londinense de clara tendencia neo-liberal, fieles estandartes del capitalismo desde el siglo XIX) admitía que- redoble de tambores- la globalización causa desigualdad. Decía eso, en enero del 2007. Mmmm… ¿eureka? ¿Genios?
- Todos sabemos lo imbécil y desafortunadamente poderoso que es George W. Bush, así también casi todos sabemos que es un presidente católico, pero resulta novedosa la forma en que profesa su fe. A mí como católico me sorprende. Es sin duda único en su especie. Les procedo a explicar. Antes de ser presidente de los EE.UU., fue gobernador del estado de Texas, uno de los únicos estados en que aún existe la pena de muerte como castigo para los delincuentes altamente peligrosos. George W. Bush, como buen gobernante católico, puso su firma como gobernador y mató a 152 personas. ¿Será como el cura Gatica, que predica pero no practica, pero en este caso, que predica, practica poco y asesina? Alabado seas.
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