Cinco frases que demuestran que el chileno promedio es arribista, discriminador, racista, machista y homofóbico.

1.- “Él/ella es un buen partido”: Expresión claramente en retirada, utilizada por abuelas y viejas, cuyo único material de lectura en su vida fueron novelas huevonas y el Manual de Carreño. Creyeron que el único modo de asegurarse un “buen futuro” era que el descendiente se comprometiera con una “niña de bien” y no una “cualquiera”, o que la jovencita se comprometiera con un mozo que pudiese afrontar económicamente los caprichos de ella y sustente a la “familia”. Hoy se ocupa poco, pero denota ciertamente ese aire a superar una barrera social impuesta por las carencias económicas.

2.- “Indio de mierda”: Frase que da cuenta del nivel de incivilización de una persona. Su contenido es netamente peyorativo. Se le atribuye al indígena un bajo nivel de refinada “civilización”, pasando por alto que el conquistador europeo sólo trajo: garrapatas, bacterias, religión, armas y un ejército de borrachos. Mientras que pueblos “incultos” como los mayas, aztecas o incas, llegaron a un elevado nivel cultural  en materias como astronomía, matemática, arte, etc., que hasta el día de hoy no tiene una explicación lógica y satisfactoria.

3.- “Negro curiche”: Chile fue un país que no tuvo esclavos, no hubo gente afroamericana en nuestro país. Por consiguiente, el arribo de personas afroamericanas, trajo consigo un enorme conjunto de prejuicios y un nivel de ignorancia gigante, de parte de personas que creían ser más “puras” por el color de piel. Claramente el chileno promedio no es nórdico, sino un mestizo peñufliento, hijo de indígenas y beodos conquistadores que no tenían dónde caerse muertos. La frase “negro curiche” ya no se ocupa mucho, sí se emplea bastante expresiones como “grone”, sobretodo por periódicos facilistas y de bajo vuelo mental como “La Cuarta”.

4.- “La cocina y las cosas de la casa, son para las mujeres”: Esta frase es extremadamente recurrente. La he escuchado en reiteradas ocasiones. Creo que se explica por sí sola, da cuenta del “rol que ocupa la mujer en la sociedad”. Sobre el particular se ha escrito bastante, por lo mismo no ahondaré en el tema. Pero pensar así, en pleno 2011, es como creer que la tierra es cuadrada.

5.- “Maricones culiaos”: Maricones, fletos, mariposones, etc. El chileno promedio tiene un trauma horrendo con la gente que tiene una inclinación sexual distinta. Ese cegado rechazo a la gente que siente amor por alguien de su mismo sexo, hace que aflore el bully fascista que critica y cuestiona al homosexual, pero que muchas veces es un homosexual reprimido. Lamentablemente, el humor chileno se nutre de este tipo de “bromas”. Humor digno de niños de 5 años. La edad mental de un país que se enorgullece de pertenecer al OCDE.