The idiot statement

The lunatic is on the grass...

(advertencia: Artículo totalmente subjetivo, razón por la cuál no me hago responsable de los sentimientos y susceptibilidades que pueda zaherir habiendo advertido previamente de su contenido).

Adjunto un fragmento de un gran escritor sobre el panorama post-elecciones del año 1970. " En un acto de imperdonable mala conducta, el pueblo chileno elige presidente a Salvador Allende. Otro presidente, el presidente de la empresa ITT, International Telephone and Telegraph Corporation, ofrece un millón de dólares a quien acabe con tanta desgracia. Y el presidente de los Estados Unidos dedica al asunto diez millones: Richard Nixon encarga a la CIA que impida que Allende se siente en el sillón presidencial, o que lo tumbe si se sienta.
El general René Schneider, cabeza del ejército, se niega al golpe de Estado y cae fulminado en emboscada:
-Esas balas eran para mí -dice Allende.
Quedan suspendidos los préstamos del Banco Mundial y de toda la banquería oficial y privada, salvo los préstamos para los gastos militares. Se desploma el precio internacional del cobre.
Desde Washington, el canciller Henry Kissinger explica:
-No veo por qué tendríamos que quedarnos de brazos cruzados, contemplando cómo un país se hace comunista debido a la irresponsabilidad de su pueblo".
Es así como se iniciaba uno de los períodos más oscuros para nuestro país, un período donde hubo un evidente atropello de los derechos humanos y una ingente serie de inequidades que no fueron subsanadas. En fin, parte de la historia que todos conocemos y que no vengo a rebatir. Ahora un tema que me parece llamativo es cómo caen estos grandes e intocables señores.
Alphonse Gabriel Capone (también conocido como Al Capone) junto con los más grandes criminales no han logrado caer por sus fechorías, sino que por un tema tributario (Evasión de impuestos). Lo que nos demuestra que Chile no es una copia feliz del edén ajeno a esos exabruptos, y que acá también caen por temas tributarios (yupi!).
Resulta quizas inefable concebir en mi mente todo el sufrimiento por el que pasaron varios compatriotas durante aquel aciago tiempo.
Ahora lo curioso es que en nuestro caso, muchas familias tal vez nunca verán plenamente saitsfecho ese apetito de equidad frente a la pérdida inavaluable de seres queridos y a enfermos vejámenes a los que fueron sometidos.
Pero cuando por fin se vislumbraba eso que muchos llaman "justicia" un hada magica se posó y tocó con su varita al ex-general, profesor de Geoplítica y (por si fuera poco) también ex-Presidente Augusto Pinochet, porque por esas casualidades de la vida todos los ministros que eficientemente han realizado todos los peritajes para dar con la tan anhelada y distante verdad han sido propuestos en la quina de candidatos para formar parte de la Corte Suprema, quizás así podrán servir mejor al país o como una retribución a su carrera que "coincidentemente" llegó en este momento (Recordemos el caso del ministro Muñoz, ahora ministro de la Corte Suprema y que encauzó de manera prolija la investigación de las cuentas de Pinochet en el Riggs, afortunadamente para Pinochet la investigación se detuvo temporalmente hasta encontrar a otro ministro que retome la investigación, dándose éste el trabajo de leer todo el expediente de nuevo).
Ahora los retoños del general están siendo procesados por evasión tributaria. Sin duda llama la atención un punto. Si bien durante el gobierno de Pinochet se llevaron a cabo varios crímenes graves, está en serio peligro por un tema tributario. Ambos son delítos, pero los primeros son malos en sí mismos y los segundos malos en razón que están prohibidos. Ahora y en armonía con el pensamiento de Carlos Peña ¿ cómo es que este grupo de personas observen tan horrenda y torcida concepción ética, que se encuentra indiferente frente a lo espantoso y se escandalizan, en cambio frente a un tema netamente patrimonial?
También concuerdo en que el responsable del sinnumero de atropellos a los derechos humanos fue Pinochet y no es competente "traspasar" dicha responsabilidad criminal a los hijos. Recordemos que la responsabilidad criminal es intransmisible, no así la civil.
Llama la atención cuanto sufre el padre porque sus hijos se dirigen en agonía- como una especie de via crucis- a los tribunales a responder por un tema patrimonial, cuando el mismo padre y ex-Presidente de Chile, privó a tantas familias de sus seres queridos (uff pareció no importarle).
En fin, solo deseo que se haga justicia y que se manifieste en la práctica de que en Chile todos somos iguales ante la Ley.